Ir al contenido
View in the app

A better way to browse. Learn more.

Colombia Humana

A full-screen app on your home screen with push notifications, badges and more.

To install this app on iOS and iPadOS
  1. Tap the Share icon in Safari
  2. Scroll the menu and tap Add to Home Screen.
  3. Tap Add in the top-right corner.
To install this app on Android
  1. Tap the 3-dot menu (⋮) in the top-right corner of the browser.
  2. Tap Add to Home screen or Install app.
  3. Confirm by tapping Install.

3 de junio de 2017

Algunas de las veces que he visto al Turco por Getsemaní, lo he visto pasar con una muchacha bien hermosa, y esas veces que la he visto ella me mira y yo la miro, pero no sé si sea porque le atraigo, o porque me querrá pegar una gaznatada bien seca en la cara para ponerme a sobrar. Yo pregunté que quién es ese Ángel caído de más allá del cielo, y me dijeron que es la hija de mi vale el Turco, y que pronto dejará de ser mi vale para pasar a ser mi suegro, porque le voy pedir la mano, y después que me case con la hija de él, pues, negociamos con los García para que me pongan de Alcalde de esta ciudad, y la hija del Turco será primera dama, definitivamente se ha convertido en uno de mis tantos amores platónicos. Ya no me quiero tirar ningún mano a mano con el Turco, ni echarme tiro ni nada, uno no debe ponerse a pelear con el suegro y futuro abuelo de los hijos míos, porque prácticamente ya somos familia. Linda linda linda, así como la alborada, y tiene un par de ojos que me flechan, nunca me ha mirado con odio ni rencor, la próxima vez le pico el ojo y le tiro un besito. Definitivamente las mujeres no dejarán de ser nuestra debilidad, ellas son las que mandan, y después salen las feministas a decir que nosotros somos los que mandamos, ¡qué vaina jodida! Pero bueno, no sé si el Turco me presta el dinero para el matrimonio, y quizá nos dé de regalo de bodas una de las casas que tiene en el Corralito de Piedra. Estoy enamorado de esa palestina, porque el Turco es Eljadue, y ellos descienden de palestinos, no sé por qué le dirán Turco, pero ajá, ese ya es su nombre de calle. A veces cuando voy a comprar un jugo de borojó por la plaza de la Trinidad, porque a mí me gusta bastante el jugo de borojó, así como me encanta la hija del Turco, pero bueno, cuando llego a comprar el jugo de borojó observo a los escoltas de él hablando paja y otros chateando con el celular bien abstraídos, y la camioneta ahí donde

cualquiera le puede poner un explosivo, para que después no digan que yo no cuido al suegro, esa es la sugerencia que le hace su yerno. Y bueno, pronto se escuchará por toda Cartagena hablar acerca de la familia Támara Hilsaca, ¡ya te dije ya! ¡Fuerte! ¡Fuerte!, yo sé que ella no me va a decir que no, a lo serio, y ella tampoco es culpable de que su papá haya hecho tanta atrocidad. Definitivamente el amor ciega al hombre, por eso es que el amor es Grande, es una cualidad que puede hacer que la humanidad se reconcilie.

Nota: No estoy mamando gallo.

De Antonio Támara León. (1989. Cartagena de Indígenas).

Escribidor, Poeta y Autodidacta, futuro premio Nobel de Literatura, de Cervantes, y de Príncipe de Asturias. Futuro Alcalde de esta ciudad.

0 Comentarios

Comentarios recomendados

No hay comentarios para mostrar.

Visitante
Añade un comentario...

Configure browser push notifications

Chrome (Android)
  1. Tap the lock icon next to the address bar.
  2. Tap Permissions → Notifications.
  3. Adjust your preference.
Chrome (Desktop)
  1. Click the padlock icon in the address bar.
  2. Select Site settings.
  3. Find Notifications and adjust your preference.